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A 27 años del debut de Maradona como entrenador de Racing

«Racing hizo todo: fue campeón del mundo y salió de la quiebra. Si algo le faltaba, era un entrenador del que se hable toda la vida y lo consiguió ahí: Maradona”, dice Claudio El Turco García, ídolo de la Academia que fue dirigido por Diego en Avellaneda, en diálogo con Olé. Un 14 de enero como este viernes, pero de 1995, Maradona, quien cumplía una sanción de la FIFA que le impedía ser jugador, luego del doping positivo en el Mundial 94, debutó como técnico de Racing en dupla con Carlos Fren. El estreno fue en un clásico de verano en Mar del Plata, contra Independiente. Con una camisa floreada, Diego, con 34 años, salió al estadio José María Minella y fue el blanco de todas las cámaras. Se saludó afectuosamente con Jorge Burruchaga, su ex compa de la Selección, que jugaba en el Rojo, y Miguel Brindisi, el técnico rival y con quien fue parte del Boca campeón de 1981.


El Turco fue fundamental para la llegada de Diego a Racing. Acá, cuenta la historia.

Y este fue el equipo con el que inició su ciclo: Ignacio González; Pablo Michelini, Gustavo Costas, Abelardo Vallejos, Carlos Soca; Marcelo Saralegui, Teté Quiroz, Roberto Galarza, Christian Akselman; Claudio García y José Luis Rodríguez. ¿El partido? Un 0-0 intenso y violento, en el que se fueron expulsados Vallejos (R) y Cascini (I) en el primer tiempo y Quiroz (R) en el final del encuentro, y la Academia tuvo las chances más claras, pero no pudo concretar. “Apuntamos al campeonato y trabajamos para eso”, aseguró el Diez tras el amistoso. Pelusa venía de dirigir, también con Fren, a Deportivo Mandiyú, al que no pudo salvar del descenso: 12PD, 1G, 6 E y 5P.

¿Y cómo llega a Racing? Tras el flojo Torneo Apertura de 1994, en el que terminó en el 12° sobre 20 equipos, Luis Alberto Cubilla dejó de ser entrenador de la Academia. Luego, el Turco fue fundamental para que la dirigencia fuera por él. Acá, lo cuenta: “Juan De Stéfano (presidente en aquel año) me consultó: ‘¿A quién podemos traer de entrenador?’ Y le dije: ‘Traelo a Diego’. ‘¿Vos sos loco? Si lo traigo nos matan, es de Boca’, me respondió. ‘Pero Diego es el Barba, es lo máximo’, le insistí. Y me pidió que lo llamara. Hablé con Diego y Marcos Franchi (su representante) y fueron a mi casa, que tenía en Villa Devoto. Yo me fui y charlaron ellos. A la hora y media, me llamó Franchi: ‘Ya está todo arreglado’”. Diego asumió en el cargo tras unas vacaciones en París con Claudia y sus hijas Dalma y Gianinna (tenían 8 y 6 años). ¿Qué hizo en la hoy ciudad de Messi? Paseó por Eurodisney, vio al PSG avanzar a los cuartos de final de la Copa de Francia frente al Auxerre, y se reunió con Éric Cantona, quien estaba interesado en sumarse a su proyecto de crear un sindicato mundial de futbolistas (se haría realidad el 28/9/95).

Siempre con la pelota, en pleno entrenamiento de la Acadé.

Siempre con la pelota, en pleno entrenamiento de la Acadé.

El 6 de enero de 1995, a las 18:22, Maradona entró al Cilindro de Avellaneda y De Stéfano presentó a la dupla técnica con miles de hinchas en las tribunas, quienes explotaron a puro cantito cuando lo vieron a Diego: “Vení, vení, canta conmigo, que un amigo vas a encontrar, que de la mano de Maradona, todos la vuelta vamos a dar…”. Había muchísima ilusión y creció después de que el astro hablara con la prensa. “Hoy soy técnico, pero mañana tal vez sea jugador… Me gustaría alguna vez tirar paredes con el Turco García y que Fren sea el técnico”, tiró. “No me llegué a ilusionar con jugar con Diego en Racing, pero hubiera sido fantástico”, cuenta ahora el Turco. “Esto es un desafío, pero no le tengo miedo a nada”, aseguró Maradona, y tras declarar se fue corriendo al vestuario, donde lo esperaba una persona muy especial: ¡Bochini! El ídolo de la vereda de enfrente se acercó para desearle éxito. Por la noche, Diego, junto a Fren y el plantel, viajó a Santa Teresita para hacer la pretemporada.

Ignacio González, el 1 de ese Racing, que hoy es el entrenador de arqueros de la Reserva del club, cuenta una anécdota de esos días: “Estando Diego, nos llovían invitaciones. En la vuelta de un asado que nos invitó un hincha, paramos el micro y ¡nos pusimos a bailar a las 12 de la noche en plena Ruta! al ritmo de La Gota Fría, de Carlos Vives. Diego se sacó la camiseta y la revoleó, condujo un trencito…”. Tras la pretemporada y los amistosos (dos empates y dos derrotas), llegó el debut oficial con Ferro, en Caballito, por el Clausura. La hinchada del Verde lo recibió con pocos aplausos y luego lo insultó. El 10 se descargó, con una mirada desafiante, tras el penal atajado por González a Víctor Molina, haciéndoles fuck you. “Lo vi luego por Fútbol de Primera, lo tengo grabado. No lo recibían en las canchas como estando en Gimnasia. Había indiferencia. Eso lo potenciaba”, recuerda Nacho, quien sufrió la zurda de Dios en las practicas. “Che, mirá que el entrenamiento es para nosotros, no para vos”, le decía al DT, que le pateaba y todas iban al ángulo. “Diego me quedó debiendo un reloj por no recibir más de 20 goles en el torneo. Se habrá olvidado con todo lo que pasó. Igual, el mayor premio fue compartir momentos con él”, reveló.

Ya en la segunda jornada, La Acadé consiguió el primer triunfo de esta era: 1-0 a Platense, el mismo resultado por el que había caído con Ferro. Se venía Independiente y el plantel de Racing amenazó con no presentarse. “No entrenamos más hasta que nos paguen los sueldos que nos deben”, le informaron a Maradona. “Hagan lo que quieran, yo los apoyo”, fue su respuesta. Finalmente, hubo acuerdo y clásico. Un 0-0 aburrido. Lo más interesante fue sobre Diego: ¡se fue expulsado por arrojarle agua al árbitro asistente! El DT se fastidió porque llamó varias veces a Hugo Páez para realizar un cambio y este lo ignoró. Fren mintió y dijo que fue él, pero no funcionó. Con saco a rayas, remera blanca y un pañuelo celeste y blanco en el cuello, se marchó insultado y escupido por los fanas rivales.

Luego, el Diez empezó a faltar a entrenamientos y partidos, se dice que sin aviso aunque el Turco niega esto último. Y además, el equipo no jugaba mal pero no ganaba: igualó con Huracán, cayó con San Lorenzo y volvió a empatar ante Talleres y Belgrano… Rompió la mala racha con un triunfazo: Racing superó 1-0 a Boca con un golazo de Roberto Galarza (hoy maneja un colectivo 148) para volver a ganar después de 20 años en La Bombonera. “Siempre me recuerdan ese gol los hinchas. Yo no era de probar mucho, pero tiré y entró. ‘¿Viste? Te dije que tenías que probar, porque tenés buena pegada’, me dijo Diego”, relata Kiki, quien agradece a D10S que “me dio una confianza que necesitaba” y dice haber sido testigo “de verlo hacer cosas que solo él podría haber hecho, ¡como hacer jueguitos con una naranja!”.

Del punto máximo de alegría, a la salida en tres fechas (1-3 con River, 1-1 con Vélez y 0-0 con Gimnasia de Jujuy), porque Osvaldo Otero le ganó las elecciones a Di Stéfano, quien lo trajo, y Diego decidió acompañarlo. “Dije que si ganaba Otero me iba. Se ve que la gente no quiere que juegue en Racing”, disparó DM, que dirigió 11 partidos: 2G 6E 3P. “Diego recordaba su paso de hermosa manera. Decía que «tiene una hinchada espectacular». Le gustaba que la gente de Racing era seguidora, que aún en ese momento de sufrimiento seguía bancando. Cantaban los 90 minutos y le hacía acordar a la hinchada de Boca»asegura el Turco. “Racing siempre se acordará de él porque se vivió una revolución”, concluye Galarza. El mural de Maradona con el buzo de DT que hay a metros de la puerta 10 del Cilindro, afirma que será eterno.

El Mural de Diego a metros de un ingreso al Cilindro.

El Mural de Diego a metros de un ingreso al Cilindro.

La placa que está al lado del mural.

La placa que está al lado del mural.

MÁS FRASES DE SUS DIRIGIDOS CON OLÉ

EL TURCO GARCÍA​

Hoy la rompe en la pantalla de TyC Sports.

Hoy la rompe en la pantalla de TyC Sports.

​Los faltazos de Diego a los entrenamientos y partidos: “A veces por sus cosas, sus problemas, que todos sabemos que tenía, por ahí pegaba un faltazo, pero no sin aviso previo. Fren nos avisaba, estabamos al tanto”.

IGNACIO GONZÁLEZ

Qué te dirija Diego…: “Todos teníamos una adrenalina de tenerlo tan cerca que solo él podía generar…»

​Una reflexión sobre el recibimiento «indiferente» de las hinchadas rivales a Diego en los estadios: «Nos pasa a todos en la vida, empezamos a reconocer con el paso del tiempo, cuando las cosas no las tenemos o se están por ir. Mientras tanto no le damos bola…”

Un tema especial del ciclo: «La Gota Fría de Carlos Vives fue una canción mística para nosotros, sobre todo en la previa de los partidos, como la de Rocky Balboa para entrenar. Es una canción que para los que estuvimos en esa pretemporada, en ese asado y viaje de vuelta (en el que paran en la ruta 11 y se ponen a bailar), quedó muy marcada.

​El entrenamiento de arquero con Diego: “No teníamos preparador físico en esa época y Diego, que estaba intacto, me pateaba. No me daba margen para que trabaje, para que llegue y agarre confianza. Él no se podía controlar, también era innato en él: pegarle y mandarla al ángulo. Nos estimuló bastante de todas formas”.

Jugó 133 partidos en La Academia y ¡marcó 8 goles! entre 1990 y 1997.

Jugó 133 partidos en La Academia y ¡marcó 8 goles! entre 1990 y 1997.

​KIKI GALARZA

Kiki Galarza con Diego, su entrenador, en 1995.

Kiki Galarza con Diego, su entrenador, en 1995.

La presentación de Diego con el plantel y cómo estaban ellos: “Nos reunió a todos y nos dijo: ‘Es una nueva etapa y todo empieza de cero. El que mejor esté va a jugar’. Todos, los más grandes y los más chicos como yo de ese plantel, estabámos locos por la llegada de él al equipo. Su presencia fue una revolución para todos. Los momentos con él son y serán inolvidables, hasta el día que me vaya… No se me borrarán nunca de la cabeza».

Una frase del Diez que le quedó grabada en la memoria: “’Tratá de hacer lo que vos sabés. Yo creo en tus condiciones’, me decía, jamás me voy a olvidar esas palabras».

El trato de Pelusa con los jugadores: ”Siempre fue un jugador más. Estaba a disposición de todos, hasta del que no jugaba”

Hoy y hace años, conduce un colectivo 148.

Hoy y hace años, conduce un colectivo 148.

​Cuando Maradona lo bancó públicamente: «El Mono Montoya tras el partido que les ganamos con gol mío declaró que ‘se clavó en el ángulo por el desvío’. Me metieron a mí en el programa y de la nada saltó Diego a felicitarme y decir que él sabía cómo le pegaba a la pelota y que le quise pegar ahí».

La pregunta de sus compañeros de trabajo: «Todos mis compañeros (conductores del 148 como él) me preguntan: ¿Qué hacía el Diego en los entrenamientos?».

La salida del ídolo: «Fue un golpe duro, pero, bueno, no veníamos bien y se dio todo así”.

Fuente: Olé

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