Federico Lanzillotta: “Milito me abrió la cabeza”

Argentinos viene de empatar (1-1) ante Platense, igualdad que terminó complicándole la clasificación a la Fase Final de la Copa de la LPF, y ahora ya no depende de sí mismo: primero deberá vencer a Unión (domingo a las 16) y luego esperar que alguno de los que está arriba suyo (Newell’s o Defensa) no gane. “A la gente que venga a la cancha le digo que va a ver una superfinal”, le comentó Federico Lanzillotta (29 años) a Olé.

El arquero del Bicho habló de lo que le falta al equipo, los pedidos de Gabriel Milito, la importancia de la cabeza cuando sufrió lesiones y el sueño de “ponerle una estrellita más a este escudo”.


«Si puedo empezar la ofensiva desde el arco, lo hago».

-¿Cómo fue el vestuario luego de igualar ante Platense?

-De derrota. Hicimos todo el desgaste y ellos, con muy poco, nos sacaron el empate. No hablamos nada entre nosotros, estábamos muy calientes.

-Y al equipo, ¿cómo lo ves?

-Estamos jugando muy bien. A mi gusto, tenemos mucho menos puntos de los que merecemos. Además de Platense, se me viene a la cabeza Defensa, que hicimos un partido bárbaro y se nos escapó en el final, con un gol medio polémico. Y contra San Lorenzo lo mismo. Pero el funcionamiento del equipo está y eso es importante: a la corta o a la larga, va a traer resultados.

-Frente a Sarmiento y Platense perdieron la chance de acercarse a la clasificación. ¿Creen que tienen una deuda pendiente en los partidos clave?

-Pasa que no nos salieron a jugar de igual a igual: nos esperaron y salieron a la contra. El dominio lo generamos, pero nos falta ser más efectivos y convertir todo lo que generamos. La deuda está, pero ojalá la saldemos este fin de semana.

-¿Cómo se preparan para el partido contra Unión?

-Hay que salir a ganar: es una superfinal.

"Contra Unión es una superfinal".

«Contra Unión es una superfinal».

-Y si pasan, ¡qué rivales les esperan!

-Está Boca, que es un grande, y Estudiantes, que viene siendo la revelación y no se lo quiere cruzar nadie. Sabemos que va a ser un partido dificilísimo, sea el rival que sea. Pero primero tenemos que clasificar.

-¿Sueñan con conseguir un título?

-El sueño está: siempre hablamos con los chicos de lo lindo y glorioso que sería sumarle una estrellita más al escudo. Ojalá que en algún momento, de tanto hablarlo con mates de por medio, se cumpla.

-¿Qué te pide Milito?

-Que sea un jugador más de campo. No importa que sea el arquero: si puedo empezar la ofensiva desde el arco, la empiezo. Salimos jugando para que el equipo rival presione, y así se generen huecos en el medio o la defensa rival. No es porque nos queremos hacer los líricos, ni ser el Barcelona o el Manchester City. Todo tiene un porqué y un propósito, nada es un tiro al aire. Aunque a la gente no le gusta mucho el tema de salir jugando.

-Tal vez no le gusta porque en Argentina no se ve mucho…

-Y… es algo medio novedoso. Pero tanto yo, como otros chicos, que tuvimos como entrenador a Gabriel Heinze, ya lo trabajamos mucho. Venimos con la idea de un mismo estilo. Y aunque da resultados, la gente se sigue poniendo nerviosa.

"Milito me abrió la cabeza"

«Milito me abrió la cabeza»

-Pero van a seguir por ese camino.

-Muchos prefieren que la revientes, por miedo a que venga el gol por un error en la salida. Pero haciendo memoria, a nosotros nos han hecho sólo un gol por errar en la salida. Si sacás los porcentajes entre los errores que hubo y las veces que progresó un ataque por un salida del fondo, los números dan a favor nuestro.

-¿En qué te mejoró Milito?

-Con este estilo de juego de ser protagonista, uno tiene que estar constantemente alerta por si un compañero tiene que jugar con vos. No te dedicás exclusivamente a atajar. Y también me abrió la cabeza: a analizar los movimientos de los rivales, a encontrar al hombre libre, a salir por izquierda o derecha dependiendo dónde esté la superioridad.

– El año pasado te tocó entrar en lugar de Lucas Chaves, lesionado. ¿Milito te dio su confianza de arranque?

-Sí, desde el primer momento. Antes de eso me había dicho que estaba contento conmigo, y eso me motivó a seguir entrenando al 100% en todo aspecto.

-¿Hablas con Chaves por las lesiones que tuvo que pasar?

-Sí, hemos hablado, porque a mí también me pasó de salir por una lesión. Aunque fueron diferentes, uno comparte algún que otro comentario. A mí no me gustaba hablar mucho de la lesión porque es lo peor que puede pasarle a un futbolista, así que trataba de distraerme con otras cosas.

Lanzillotta, consolidado en el arco del Bicho.

Lanzillotta, consolidado en el arco del Bicho.

-¿Quién te ayudó en ese momento?

-Tuve el apoyo de mi familia, que no me dejaba faltar ni un día a entrenar o a rehabilitarme. Lo bueno es que siempre tuve club y recibía también apoyo de ahí.

-Y hay que cuidar mucho la cabeza…

-Esas cosas a uno lo hacen más fuerte. La primera lesión que tuve en la rodilla fue en un gran momento mío: era muy joven, y sentí que se me cayó todo. Es como que estás haciendo tu casa, y de repente se derrumban todos tus sueños. Uno de eso sale con otros pensamiento, y empieza a disfrutar del día a día: el ir a tomar mate con los compañeros al vestuario, por ejemplo. Porque cuando se viene de estar en reposo y en cama, esas cosas se valoran más.

Fuente: Olé

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