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PREMIO NOBEL DE LA PAZ: ¿CUÁL ES LA HISTORIA DE EL EQUIPO ARGENTINO DE ANTROPOLOGÍA FORENSE?

El Equipo Argentino de Antropología Forense fue nominado al Premio Nobel de la Paz por la Universidad de Quilmes y el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales como reconocimiento a su labor por la Verdad y la Justicia.

Real Noticias hace un pequeño recorrido por su historia y sus contribuciones en las distintas sociedades donde ofrecieron su labor.

Todo comenzó luego de la restitución de la democracia en nuestro país. A principios de 1984, la CONADEP y las Abuelas de Plaza de Mayo, solicitaron la asistencia del Sr. Eric Stover, entonces director del Programa de Ciencia y Derechos Humanos de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS, Washington, DC). Stover organizó el viaje de una delegación de expertos forenses norteamericanos a Argentina, donde encontraron varios cientos de esqueletos exhumados sin identificar almacenados en bolsas plásticas en los depósitos polvorientos de varios institutos médico-legales. Muchas bolsas contenían los huesos de más de un individuo.

Entre los miembros de la delegación de la AAAS estaba el Dr. Clyde Snow, uno de los expertos más reconocidos mundialmente en antropología forense, quien convocó a arqueólogos, antropólogos y médicos para comenzar las exhumaciones y análisis de restos esqueletarios utilizando las técnicas de la arqueología tradicional y la antropología forense. Snow volvió a la Argentina en varias oportunidades durante los siguientes cinco años, entrenando a los actuales miembros del EAAF –quienes decidieron participar luego de varios encuentros – ayudando a la formación en si misma del Equipo Argentino de Antropología Forense, grupo pionero en la aplicación de las ciencias forenses para la documentación de violaciones a los derechos humanos que colaboraron en el descubrimiento de lo que había sucedido con las personas desaparecidas durante la dictadura civico-militar (1976-1983) y a restituirlos a sus respectivas familias

En 1986, el EAAF comenzó a expandir sus actividades más allá de la Argentina y hasta ahora ha trabajado en cerca de 30 países a todo lo largo de América, Asia, África, y Europa. A la fecha, el EAAF ha realizado misiones en Angola, Bolivia, Bosnia, Brasil, Chile, Colombia, Croacia, la república Democrática del Congo, Timor Oriental, El Salvador, Etiopía, Polinesia Francesa, Guatemala, Haití, Honduras, Indonesia, Kurdistan Iraquí, Kosovo, Costa de Marfil, México, Panamá, Paraguay, Perú, Filipinas, Rumania, Sierra Leona, Sudáfrica, Uruguay, Venezuela y Zimbabwe.

Un principio fundamental para el equipo desde su fundación –como lo expresan en el video- ha sido respetar profundamente los deseos de los familiares de las víctimas y de las comunidades en lo concerniente a la investigación; y trabajar de una forma muy cercana a ellos durante todos los pasos de la exhumación y durante el proceso de identificación. Durante su experiencia profesional, el EAAF ha observado que la identificación de los restos es una gran fuente de consuelo para las familias. Poder brindar la ciencia en su lado más humanitario para que se pueda acercar a la veracidad de los hechos y dejar atrás la incertidumbre que ronda en la mayoría de los casos que tratan. “Nosotros trabajamos con los vivos, más que con los muertos” sentencia uno de los integrantes.  

Entre algunas de las actividades que se destacan de este equipo son el laboratorio de Genética Forense (único en su tipo en Argentina), la identificación del cuerpo del Che Guevara, el descubrimiento de cadáveres en el Cementerio de Avellaneda, la identificación de soldados caídos en Malvinas y la reconstrucción de la masacre de Ayotzinapa

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