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La emoción de Clerc por la situación de Guillermo Vilas

La historia entre José Luis Clerc y Guillermo Vilas es tan contradictoria como emocionante. Es que los dos tenistas fueron ícono de una época del deporte argentino y, sin embargo, llamaba la atención la gran rivalidad que había entre ellos, al punto de llegar a no dirigirse la palabra. Pero la vida los forzó luego a limar asperezas y los unió. Y el cariño es tanto que Batata volvió a quebrarse en público por la actual situación de salud de Willy.


Clerc con Vilas, reconciliados, en la última exhibición que jugaron.

El enojo desaparecía solamente cuando compartían equipo en la Copa Davis. Ahí querían que al otro le vaya bien porque ambos sabían que el país estaba por encima de sus diferencias dentro de la cancha. Luego de un tiempo, las dos figuras se contactaron y pudieron recomponer su relación, aunque ahora la enfermedad de deterioro cognitivo que sufre el ex tenista de 69 años lo mantiene alejado y centrado solo en él y en sus afectos más cercanos. Así lo contó Batata en el programa de Juana Viale por Canal Trece.

Clerc lloró al hablar de Vilas

«Me conmueve mucho, disculpen«, comenzó el comentarista de ESPN que se tomó unos segundos para responder la pregunta de Juana Viale sobre el estado de salud de su ex colega. «Hice toda mi carrera con él, es doloroso lo que está viviendo Guillermo. Es muy duro hablar de él»​, expresó quien se enteró de la triste noticia cuando Willy le mandó un mensaje que decía ‘Batata, estoy un poco enfermo’. 

«Él se portó muy bien con un tema personal familiar y para mí eso borró todo», reveló Clerc, y en diálogo con los otros invitados reconoció: «Gracias a que él fue mejor que yo, abarcó toda la presión, sobre todo cuando veníamos a jugar a Argentina y yo era el que lo acompañaba».

Vilas con su amigo Borg, que lo visitó en abril de 2021.

Vilas con su amigo Borg, que lo visitó en abril de 2021.

«Lo extraño, lo quiero, lo adoro y sufro mucho. Lo bueno es que hace un par de semanas hablé con un amigo suyo de allá y me dijo que estaba estable», finalizó conmovido, quien lo reconoció como número uno del mundo entre 1975 y 1976 (petición que aún no aprueba la ATP), en una entrevista con Fantino.

Fuente: Olé

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