El avance de la nueva tecnología aplicada al servicio de pasajeros en Concordia comenzó a generar preocupación debido a las versiones cruzadas. Por un lado empresas de remíses manifiestan su rechazo a la llegada de Uber, mientras que los trabajadores de la aplicación solicitan la libertad para llevar adelante su tarea.
En el último tiempo se incrementó la cantidad de choferes de aplicaciones que ven como una salida laboral en tiempos de crisis, mientras que hay muchos otros que dejaron de prestar servicios como remíses o taxis y lo hacen a través de la aplicación. Son más de 200 los trabajadores que se han volcado a la aplicación.
Ante este panorama de incertidumbre, en el que reina la posibilidad de multas rigurosas y hasta el secuestro de vehículos, desde el municipio buscan brindar un marco regulatorio. Sebastián Gotte es jefe de Transporte de la Municipalidad de Concordia y se refirió a la regulación. “Hoy la discusión que tiene el municipio no escapa a lo que sucede en otras ciudades. Es un concepto de negocio nuevo, que sale de lo convencional. Lo que nos preocupa a nosotros es la experiencia que puede llegar a tener el pasajero y la seguridad”, dijo. Y agregó en LT 15 Radio del Litoral: “No se le pide nada más ni nada menos que a quienes prestan servicio de transporte urbano de pasajeros, o sea, reducido a menos de cuatro pasajeros. Llegamos a un acuerdo con la aplicación de pedir el carné profesional, como también tenemos constatado que hay vehículos que están trabajando con la aplicación que le ofrecen un seguro, pero el seguro no está radicado en Argentina”.