El diputado concordiense comunicó su acompañamiento a la iniciativa nacional del proyecto de impuesto a las grandes fortunas.
En la mañana de hoy el diputado de la legislatura entrerriana Nestor Loggio expresó en una entrevista radial por LT15 el acompañamiento de legisladores oficialistas a esta iniciativa nacional, liderada por los diputados nacionales Carlos Heler y Máximo Kirchner con el visto bueno del presidente Alberto Fernández.
El funcionario explicó que en este momento de pandemia mundial es lógico pedirle un aporte extraordinario a los 12 mil ricos de la Argentina, millonarios en dolares, para ayudar a sostener el gasto que el Estado está teniendo en diversas áreas, como el pago de los salarios a trabajadores de empresas, subsidios para las clases más vulnerables, insumos para los hospitales, etc. “La recaudación no puede darse sobre los impuestos al consumo” aseveró.
Loggio destacó que los sectores más ricos de la argentina pagan proporcionalmente muy poco, que son quienes más fugan el dinero del país y que “históricamente han usado al Estado para enriquecerse”. También recordó el encuentro del presidente con la canciller alemana Ángela Merkel, donde la mandataria destacaba la escasa contribución de los sectores más ricos en nuestro país. En Europa se están trabajando en proyectos análogos al de la Argentina, con la salvedad de que en el viejo continente los más favorecidos económicamente ya pagan muchos más impuestos.
Se refirió además a la limitación de la emisión de billetes, y a la recaudación que se genera en base a otros impuestos, como el IVA, donde todos aportan en igualdad de condiciones cualquiera sea su estrato social, “desde el desocupado de zona oeste de concordia hasta la familia Roca, dueños de Teichin”.
Consultado por la fecha de presentación del proyecto, el diputado informó que seguramente se presente la próxima semana en la sesión ordinaria de diputados y que espera que “los diputados del radicalismo apoyen esta idea”
“El esfuerzo hay que hacerlo de arriba hacia abajo y no al revés” concluyó Nestor Loggio.
